Fue construido para defender el paso por el Río Piedras y como defensa para la gente de la aldea. Fue completamente destruido en el siglo XVI y los muros que se conservan han sido declarados Bien de Interés Cultural. Actualmente, los restos del castillo, junto con otros restos arqueológicos importantes, forman parte del Complejo Hotelero Fuerte de El Rompido.